OTRO"CLÁSICO"MÁS
Acaba de terminar el partido entre Colo-Colo y la Universidad de Chile, en un Estadio Monumental lleno, con un calor infernal de domingo en la tarde en Santiago. Sin embargo, no ví el partido. ¿Por qué? Simplemente porque el fútbol chileno es un asco. Sólo veo los partidos de mi querido Unión San Felipe (que a todo esto cumplió 51 años de vida el martes pasado...), y que es una cuestión más de nostalgia que por ir a ver buen fútbol, dónde.
¿Y qué hacía yo mientras miles de hinchas se derretían de calor en el estadio?
Yo compartía con mi familia un almuerzo de domingo, y una tarde en el Cementerio de Carretas (lugar típico de Putaendo, en el gran Valle del Aconcagua), con el silencio, con la vista al Valle, con el viento golpeándote gratis en la cara, con la grandeza de lo mínimo.

Debo admitir que de vuelta a casa igual íbamos escuchando el partido en la radio, no puedo estar fuera del acontecer nacional, obvio.